“Can Facundo” es como se ha llamado popularmente la tienda de comestibles que da nombre a este restaurante. Hace años sus propietarios incorporaron al negocio una asador, y finalmente se decidieron a habilitar la casa familiar contigua como restaurante. El resultado es un local espacioso, con carácter y mucha luz.
El local, que hace esquina, está formado por dos ambientes diferenciados. La antigua vivienda, del que se derribaron todos los tabiques, está dedicada a la venta de platos preparados y el bar. Esta es la zona con más encanto debido a la conservación de elementos antiguos: se pulió el suelo, de mosaico hidráulico; se restauró el techo de bovedillas, dejando a la vista el ladrillo, que había sido pintado; y se repicó la pared que da a la calle para dejar la piedra vista.
La amplitud del espacio, de una longitud considerable, permitió la instalación de una gran barra que, haciendo esquina en su extremo, enlaza con la zona de restaurante, perpendicular al bar. A pesar de tratarse de un área completamente diferente – había sido el garaje de la casa- se quiso que no hubiera ninguna separación. Para conseguirlo, además del derribo de la pared existente, se salvó el desnivel con una rampa ancha que permite transitar con fluidez, a la vez que hace el local perfectamente accesible para personas con movilidad reducida.
A pesar de ser una zona más moderna, con techo insonorizante, se dejó el suelo de cemento existente, restaurando las partes más degradadas con un carrete que imita el primitivo grabado antideslizante, una herramienta de los años treinta rescatada del almacén de Tané Construccions. Los principales atractivo de la estancia son, sin embargo, la chimenea por un lado, construida con la intención de que sea uno de los principales atractivos del establecimiento; y, por otro, la luz. Orientada a cara sur, se aprovechó esta circunstancia haciendo una gran apertura, el marco de la cual entra en el local, de manera que el espacio ganado en el interior se aprovechó para instalar una puerta. Al otro lado de la estancia, se hizo otra abertura para aprovechar también la luz del patio, que se adecuó para el uso como terraza.