La austeridad es la premisa de esta casa, donde la calidad de los materiales y acabados toma todo el protagonismo. Se trata de un antiguo local comercial y un apartamento transformados en una sola vivienda de planta y piso. La amplitud y funcionalidad son principios básicos, ya que sus propietarios la usan como punto de reunión veraniego de una familia extensa. Por ello, los espacios comunes están preparados para albergar un gran número de personas, y cada habitación dispone de su baño.
El pavimento de toda la casa es de cemento pulido, un material aplicado por nuestros trabajadores de gran resistencia y aspecto muy coherente con la estética general. En los baños, lavabos, bañeras y duchas están hechos de obra y estucados a la cal, con un resultado similar al del suelo. Los muebles, totalmente blancos i rectos siguiendo el minimalismo imperante, están diseñados especialmente para la casa y fabricados por nuestros carpinteros.
Faltada de espacios exteriores, para dotar a la casa de la máxima luminosidad y al mismo tiempo garantizar la intimidad se colocaron vidrios polarizados en las ventanas, que obstaculizan la visión desde fuera. Además, se instalaron tubos de luz que, con un sistema de espejos, la conducen desde el tejado hasta las habitaciones interiores.